Una presentación clínica singular equivale a un trabajo en equipo para un diagnóstico preciso

En Somalia, trajeron a un bebé para evaluarlo.

Un bebé de tres días de nacido llegó a la clínica de MSF para una evaluación en Somalia. Presentaba deformidad torácica y movimientos anormales del tórax, que su mamá notó mientras lo bañaba. La madre dio a luz al bebé después de nueve meses de gestación, en casa y sin ninguna complicación.


Se trataba del sexto hijo de la familia; de los seis, solo cuatro estaban vivos y con buena salud. De los partos anteriores, nacieron mellizos, pero uno de ellos falleció poco después de nacer, mientras que el otro falleció a los tres años por causas desconocidas.


La madre indicó que, durante el octavo mes de embarazo, sufrió una caída sobre el vientre, lo que le provocó un sangrado vaginal leve. Fue hospitalizada y requirió transfusión de sangre, pues padecía de anemia. Afortunadamente, el feto resultó ileso.


El recién nacido pesó tres kilos, estaba frío al tacto y presentaba decoloración azulada de la piel como consecuencia de insuficiente oxígeno en la sangre. Durante la evaluación torácica, se descubrieron una deformidad en el lado derecho del pecho y un pezón adicional en ese mismo lado del pecho.


Dada la singularidad de esta presentación clínica, el equipo médico del proyecto remitió el caso a la plataforma de telemedicina para asesoramiento radiológico y tratamiento clínico. Se encargaron del caso el Dr. Jaap Karsten, pediatra general que practica la telemedicina en los Países Bajos, junto con las doctoras Michelle Fink y Edith Rivoal, radiólogas ubicadas en Australia y Francia, quienes, con frecuencia, se ocupan de casos complejos de radiología pediátrica. Ambas radiólogas concordaron en que se trataba de una enfermedad hereditaria poco común llamada disostosis espondilocostal, un trastorno del crecimiento del esqueleto caracterizado por anomalías generalizadas y ocasionalmente graves en la columna vertebral y las costillas.


Afortunadamente, el bebé no presentaba otras condiciones médicas aparte de la deformidad esquelética diagnosticada por las radiólogas. Según la recomendación del pediatra de telemedicina, el bebé fue tratado posteriormente con oxígeno y terapia de apoyo. Además, en los siguientes siete días, se inició con éxito la lactancia regular, y los padres recibieron asesoramiento e información útiles antes de darle de alta al bebé.


Este ejemplo demuestra la gran importancia del apoyo de la telemedicina especializada para identificar de manera rápida y precisa una malformación congénita poco común, garantizar un tratamiento basado en la evidencia y ofrecer al equipo médico del proyecto la oportunidad de recibir capacitación médica.

Por: Dra. Nilza Angmo y Dr. Ahmed Igbin

Ir al contenido
This site is registered on wpml.org as a development site. Switch to a production site key to remove this banner.